Leyenda de la Laguna Magdalena

La hermosa Laguna Magdalena es uno de los lugares más visitados, el cual se encuentra en el municipio de Chiantla, Huehuetenango. Su color varía según el reflejo del cielo ya que éste puede darle un color azul claro u obscuro, que contrasta en el centro con el verde-turquesa de las orillas.

La Laguna Magdalena es un santuario natural debido a la paz armoniosa del lugar, la frescura del clima y el paisaje boscoso de las montañas de su alrededor. Esta impresionante e inigualable laguna ha sido inspiración para varios relatos y leyendas, conoce la interesante historia detrás de la leyenda de la Laguna Magdalena de la región de la Sierra de los cuchumatanes, Huehuetenango.

Cuenta la leyenda que desde muchos años atrás, una familia procedente de San Juan Ixcoy, se encontraba perdida cerca del lugar en busca de un pozo que contuviera agua del vital líquido. Entre los miembros de la familia se resalta una niña de nombre Magdalena, a quien le habían asignado la tarea de buscar el pozo y llevar agua para el consumo familiar.

Según se cuenta, cuando la joven regresaba al pozo en busca de agua quedaba impresionada ya que la chica observaba preciosas joyas en el fondo, como collares, aretes y anillos.

La pequeña pensaba en llevar las joyas a su familia, pero para eso tenía que sacarlas del pozo, sin embargo, no lograba alcanzarlas y después de varios intentos para ella era imposible alcanzar los tesoros, así que decidió contárselo a su madre para que juntas regresaran para poder sacarlas. Al llegar al lugar, dentro del pozo no había nada más que agua pero se dio cuenta que las joyas aparecen solo cuando esta sola.

Luego de intentarlo muchas veces día tras día, la jovencita se propuso regresar y no volver hasta alcanzar dicho tesoro, por lo que la madre decidió comentarle a su esposo y así esperar juntos a que la niña regresara.

Con el transcurso de los días los padres no volvieron a saber nada de ella, lo cual los preocupó mucho. Se dice que cuando la chica regresó al pozo, justo cuando se encontraba a unos metros de él, una extraña e inmensa nube la rodeó y desapareció junto con ella.

Pasaron los años y Magdalena, inesperadamente regresó a su hogar pero con ella llevaba un niño que se cree que era su hijo. Cuando la madre pidió ver a su nieto la joven se negó, pero le dejó un extraño cofre que le advirtió no abrir hasta que pasaran 15 días.

Su padre se encontraba en su hogar cuando recién había regresado de su trabajo y escuchó a la esposa impaciente por abrir el cofre. Sin embargo ambos acordaron respetar lo que la hija les había dicho sobre esperar, pero a la madre la dominaba la curiosidad y decidió abrir el cofre en el momento oportuno, es decir, cuando su esposo estuviese en el trabajo.

Dentro del cofre había una enorme serpiente que la espantó al momento de abrir el cofre, pero el animal siguió el cauce del arrollo hasta llegar al pozo donde se escondió. Se dice que ahí comenzó a crecer hasta formarse la laguna.

Los pobladores afirman haber visto en el centro de la laguna una joven rodeada de inmensas nubes, se cree que era Magdalena quien salía a peinarse. Esa es la razón por la cual decidieron llamarle "Laguna de Magdalena".

Publicado por: Pablo Ordoñez

Fuente: deGUATE.com

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